El Gran Cañón del Colorado, una de las siete maravillas naturales del mundo.


El río Colorado a su paso por Arizona ha sido a lo largo de millones de año un brillante artista que ha modelado una de las maravillas naturales del mundo. Por eso, a la hora de plantearte un viaje por la costa oeste de Estados Unidos, debes tener claro que el Gran Cañón es una visita imprescindible.

Para nosotros fue la última parada, antes de volver a España.... ¡y que parada! En todos los blogs coincidían que la mejor manera de visitar el Gran Cañón es por el aire... ¡cuanta razón tenían!

En El Corte Inglés viajes nos ofrecían excursiones de diversos tipos y todas ellas estaban operadas por una empresa llamada Papillon. Como buena bloguera me sumergí en blogs y buscando opiniones y demás referencias, di con la página web de Papillon Tours (http://es.papillon.com). ¡ay, CorteInglés.... que te ví chato! Las mismas excursiones, e incluso algunas mejores a precios mas económicos. Por lo que decidí reservarlo por mi cuenta en la propia pagina web.



Hay diversos paquetes, pero nosotros que estábamos en "honeymoon", nos decantamos por un paquete bien grande, completito y no muy extenso en duración, ya que nuestra estancia en Las Vegas no iba a ser muy prolongada...

La aventura comenzó cuando una gran limusina llegó a nuestro hotel (Bellagio) a recogernos para comenzar la excursión. Poderío. Brutal. Olé.

Desde el hotel, partimos hacia la terminal del aeropuerto McCarran Executive Atlantic en Las Vegas. Allí conocimos a nuestra capitana de vuelo, una simpática mujer que tras registrarnos en la entrada, nos dio información orientativa sobre el vuelo, lo que íbamos a ver y la duración para cada actividad.

Durante todo el vuelo te van explicando datos importantes y curiosidades de las zonas que se van sobrevolando, como por ejemplo, el Lago Mead o la Presa Hoover.
Sobrevolando el Mead Lake.


Presa Hoover.

Después de 45 minutos de vuelo, aterrizamos para visitar el gran puente de vidrio SKYWALK. Esta atracción se encuentra en el "Grand Canyon West" un área localizada dentro de la reserva india de los Hualapai. De hecho, son ellos los que gestionan, dentro de su territorio, el complejo turístico que rodea al Skywalk.

La pasarela fue construida en el año 2006 y se denominó Skywalk porque imita la experiencia de andar por el cielo. La financiación vino del magnate de Las Vegas, David Jin con un coste de 30 millones de dólares y la aprobación de los líderes indígenas de estas tierras. Esta maravilla de la técnica, te lleva sobre los suelos de cristal hasta el infinito (por cierto, los paneles de cristal son de España, ¡ele!). En su inauguración fueron invitados personajes de relevancia como el astronauta Buzz Aldrin, la segunda persona que pisó la Luna y John Herrington, astronauta de ascendencia india en representación de los indios Chickasaw.

La pasarela está formado de un puente en forma de U, está a 21 metros del borde del cañón y se sitúa a mas de 1200 metros sobre el fondo del cañón.

Dentro del Skywalk...señores no ilusionarse con fotos postreros para Facebook... está prohibido el uso de cualquier cámara (móviles tampoco). Por eso, Papillon te regala dos fotos de recuerdo gratuito y también nos dieron una pequeña mochila con golosinas, frutos secos y agua.

Al salir de la atracción, nos dieron un tiempo libre para visitar la reserva india y hacernos fotos en el parque natural.



Después de la abrumadora experiencia en el Skywalk, subimos de nuevo al helicóptero para realizar el vuelo de regreso a las vegas... antes de aterrizar, sobrevolamos Las Vegas...



Como ya dijo Elvis... ¡¡¡Viva Las Vegas!!!




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